El presidente de YPF, Miguel Gutiérrez, consideró como "una medida muy acertada" el acuerdo del Gobierno nacional con las refinadoras de petróleo para mantener los precios de los combustibles durante 60 días, tal como se anunció la semana pasada.

El directivo también afirmó que aún no se acordó si la compensación a las empresas será a través de rebaja de impuestos o en efectivo en caso de que las empresas no lleguen a trasladar los aumentos durante el segundo semestre.

Así lo expresó el titular de la petrolera tras participar en Tucumán de la inauguración de la Central Térmica El Bracho, una obra que demandó una inversión de 170 millones de dólares que le permitirá aportar, con su socia General Electric, unos 27 megavatios al sistema eléctrico.

"No se habló cuál es el instrumento de compensación, se va a hacer una cuenta al 31 de diciembre y al 31 de marzo de 2019 se compensará con los mecanismos que se convengan pero no se discutió si podrá ser un pago en efectivo o una rebaja de impuestos", dijo Gutiérrez.

Es que las petroleras manejan como referencias de sus costos la evolución del tipo de cambio, el precio del barril de petróleo del tipo Brent, los biocombustibles para el corte de naftas y gasoil, además de los costos de operación, las que se encuentran todas al alza en las últimas semanas.

"Es una medida muy acertada para ver dónde aterrizan todas estas variables y luego conversar cual es la mejor manera posible de pasar eso al mercado", expresó Gutiérrez a la prensa al referirse por primera vez al acuerdo alcanzado la semana pasada con el Gobierno.

Reacomodamiento

El sector tiene desde el 2 de mayo 60 días para esperar el reacomodamiento de las principales variables que definen sus costos y en consecuencia el precio de sus combustibles en el surtidor, por lo que Gutiérrez entendió que "ante una turbulencia como la que se viene registrando en las últimas semanas sería lógico calmarse, ser muy seriosy volver a sentarse con las autoridades".

"Queremos que estos movimientos tan bruscos impacten lo menos posible en nuestros clientes. Como YPF no podemos llegar con cualquier aumento porque es muy importante entender que del otro lado del mostrador hay un cliente que tiene una vida y tiene un ingreso, no queremos perderlo", enfatizó el ejecutivo.

No obstante, Gutiérrez explicó que queda por delante "ver la mejor forma de llevar adelante" el proceso de ajuste de precios porque "la empresa invierte 4.000 millones de dólares al año y no quiere endeudarse, al contrario está bajando fuertemente su endeudamiento y sus recursos provienen de la generación de negocios".

En este contexto, la petrolera que domina el 55% del mercado de combustibles en el segmento minorista aceptó junto a Shell y PAE-Axion asegurar una estabilidad de precios por 60 días con un eventual traslado de precios distribuido a lo largo del segundo semestre.

Pero si los costos no logran equiparar al 31 de diciembre los precios en el surtidor, Gutiérrez ratificó que "hay un compromiso del Gobierno de recibir una compensación por parte del Estado nacional por lo que no podamos trasladar al consumidor". (Télam)